Analizamos los
requisitos del accidente “in itinere” y la protección del trabajador en estos
casos.
¿Qué es una accidente in itinere?
Los
trabajadores podemos tener dos tipos de baja laboral: por contingencias comunes
o por contingencias profesionales.
·
las que son por contingencias comunes se deben a
enfermedades comunes y por accidentes ajenos al trabajo
·
las que son por contingencias profesionales
tienen su origen en enfermedades relacionadas con el trabajo o por accidentes
sufridos en el trabajo.
El artículo
156 de la Ley General de la Seguridad Social (LGSS) define el concepto de accidente de trabajo:
“Se entiende por accidente de trabajo toda lesión corporal que el
trabajador sufra con ocasión o por consecuencia del trabajo que ejecute por
cuenta ajena. Tendrán la consideración de accidentes de trabajo los que
sufra el trabajador al ir o al volver del lugar de trabajo.”
Los accidentes in
itinere, por lo tanto, son los que sufre el trabajador mientras va o regresa
del centro de trabajo..
En 2018, de los 725 accidentes laborales mortales registrados, 153 lo
fueron in itinere.
Muchas
veces se piensa solo en los accidentes de tráfico
que se tienen en ese camino, que son casi un 90% del total, pero también lo son
otro tipo de accidentes como un esguince andando por la calle, caerse en las
escaleras del metro, caerse de la bicicleta con la que se va a trabajar, caerse
por las escaleras del edificio donde se vive, etc, todos ellos cuando se va a
trabajar, etc. En estos casos, se habrá tenido un accidente de trabajo.
No todo accidente de camino al trabajo es un
accidente in itinere
En el
caso de que se haya interrumpido o modificado el camino habitual entre casa
y el trabajo, es posible que se haya roto el nexo causal y deje de
ser un accidente de trabajo, por lo que hay que estudiar siempre cada caso,
analizando si hay interrupciones temporales sustanciales y si el accidente
ha sido en el recorrido habitual.
Requisitos para considerar que un accidente es in
itinere
Como
veremos más adelante, si un accidente se considera in itinere,
tiene una protección mucho mayor para el trabajador que si se considera un
accidente no laboral.
Para ser considerado un accidente in itinere tiene que darse los
siguientes factores:
·
Que sea en el itinerario habitual y normal de
casa al trabajo o del trabajo a casa, aunque puede ser por
varios caminos.
·
Que se haya producido en el tiempo que normalmente
se tarda de casa al trabajo y viceversa. Ese tiempo pueden ser
10 minutos o una hora y media, dependiendo de cada caso.
·
Que no haya interrupciones en el camino. Por ejemplo un
trabajador que sale de casa, se desvía para llevar a sus hijos al colegio y
luego al trabajo, habrá hecho una interrupción. En cambio pararse un momento a
comprar tabaco de camino no es una interrupción, dependerá de cada caso.
·
Que el accidente sea en el transporte habitual
que se utilice. Hay casos en los que incluso el monopatín se ha considerado un medio
de transporte, ya que el trabajador iba siempre en monopatín a su puesto de
trabajo.
En el caso de que el
accidente no sea considerado un accidente de trabajo por haber roto ese nexo,
será entonces un accidente no laboral y seguirá siendo una baja laboral, pero
por contingencias comunes, no por contingencias profesionales, con lo que su
nivel de protección será también menor.
Ampliación del concepto de accidente in itinere
La jurisprudencia ha ido poco a poco ampliando el concepto de
accidente in itinere, examinando caso a caso, sobre todo con las nuevas
situaciones familiares y de desplazamiento de los trabajadores.
Por ejemplo, se ha
reconocido que es un accidente de trabajo el accidente que tuvo un trabajador
cuando se desplazaba entre su centro de trabajo y el domicilio familiar, que no
era el suyo habitual. Era un trabajador desplazado a otra Comunidad Autónoma,
que los fines de semana acudía al domicilio familiar, y tuvo un accidente de
trabajo en ese desplazamiento. A pesar de no ser un accidente entre el centro
de trabajo y el domicilio habitual, en el camino habitual, se reconoció como in
itinere, al ir todos los fines de semana al domicilio familiar.
En otros casos no han
sido considerados en cambio como accidentes in itinere, como el desplazamiento
desde la casa de otros familiares, de una novia, cuando el accidente fue por
irse antes del trabajo, cuando se desvió para ir a recoger a la pareja por su
centro de trabajo, etc.
Qué hacer si se sufre un accidente de trabajo in
itinere
Cuando se
sufre un accidente in itinere, es necesario actuar igual que en un accidente
que ocurre en el centro de trabajo. Normalmente suele ser necesario
probar que este accidente ha sufrido en el camino al trabajo, por lo
normalmente es bueno tener pruebas del accidente,
como un parte de la policía o de la guardia civil, si es un accidente de
tráfico por ejemplo, o de la ambulancia si ha sido una caída en la calle. De
esta forma se podrá demostrar donde y cuando ha sido el accidente, para demostrar
que fue en el camino al o desde el trabajo.
Además
habrá que informar a la empresa de este hecho, así como acudir a la Mutua para
recibir la asistencia sanitaria. Si el accidente es grave, se puede
acudir al médico u hospital más cercano y luego acudir a la Mutua.
¿Por qué es importante que el accidente sea
reconocido como in itinere?
Es
importante que el accidente sea reconocido como in itinere, para que sea considerado como accidente laboral, que
conlleva algunas ventajas de protección frente a los accidentes no
laborales:
·
Se cobra la baja desde el primer día
·
Se cobra una cuantía superior de la baja
·
En caso de dejar de trabajar estando de baja, el
tiempo de baja no será descontado cuando se pida el paro al recibir el
alta.
·
La empresa y la Mutua asumirán más
responsabilidades.
Los accidentes de
camino o regreso al trabajo son la segunda causa de fallecimientos por
accidente laboral, después de los infartos y derrames cerebrales.
Este tipo de accidentes
in itinere va en aumento debido por un lado a que cada vez es más necesario el
uso del vehículo en los trabajos y por otro a la precarización del mercado
laboral. La temporalidad, la parcialidad, los bajos salarios o las
rotaciones excesivas están provocando altos niveles de estrés y la necesidad
para muchos trabajadores de simultanear varios empleos, con lo que se
reducen los necesarios tiempos de descanso.